Fecha:  17/Jul/2014   Periódico: Revista Crónica   Sección: Política   Pagina: 32

Son los encargados de proponer soluciones a corto, mediano y largo plazo a temas políticos, económicos y sociales que afectan al país. Surgieron en Guatemala y Latinoamérica para llenar el vacío dejado por los políticos, la academia y las universidades.

Marcela Marroquín Cabrera mmarroquín@cronica.com.gt

Estas organizaciones hacen las veces de partidos políticos en muchos países donde funcionan, ya que precisamente es de esas agrupaciones partidarias de donde se deben desprender ideas, valores, propuestas, estudios y, sobre todo, planes a corto y largo plazo para reordenar el rumbo político y económico de un país.
Los tanques de pensamiento en Guatemala comenzaron a ver la luz a finales del siglo pasado, ya que en respuesta a una coyuntura política y social un tanto apretada, coartada y con una participación sesgada de quienes decidían optar a un cargo público, pocos eran los valientes propulsores de ideas y planes para darle un giro fresco e innovador a la sociedad guatemalteca.

¿Qué es un tanque de pensamiento o “think tank”?
Una frase que los describe podría ser: “Expresión de ideas”. Son instituciones con un buen grupo de expertos de naturaleza investigadora en el ámbito de las construcciones ciudadanas, ciencias sociales, políticas y económicas. Están vinculados o no a partidos políticos o grupos de presión y se caracterizan por algún tipo de orientación ideológica, marcada de forma que incida sobre la opinión pública.
Tienen una actividad dedicada a la reflexión intelectual sobre asuntos científicos, estratégicos, culturales, políticos y economicos a nivel nacional e internacional, que dan como resultado consejos o directrices que políticos, funcionarios, partidos o mandatarios pueden utilizar para su actuación en sus propios ámbitos. Un think tank tiene estatus legal de institución privada, normalmente en forma de fundación no lucrativa y defiende diversas ideas.
El nombre de estas agrupaciones viene de la expresión inglesa “Think Tank”, que literalmente significa el depósito de pensamientos. Se ha intentado adaptar al español con distintas expresiones como comité de expertos o de sabios, instituto de investigación, gabinete estratégico, centro de pensamiento, laboratorio, reservorio o almacén de ideas.
Pero estas expresiones, traducidas al castellano, no logran transmitir la imponente categoría de su traducción literal: “Tanque de pensamiento”, con la que muchos ya están familiarizados y no pierden nada usándola.
Una de sus principales funciones es la promoción de espacios de debate y diálogo para desarrollar y capacitar a futuros tomadores de decisiones y cuadros políticos. En primera instancia son generadores de conocimiento, información y opinión. Es importante que sean lo más autónomos posible, sobre todo porque en un país como Guatemala, la manera en la que se mide con criterio es a partir de su independencia. Eso le da valor y legitimidad a la organización privada, explica Cristhians Castillo, jefe de la división sociopolítica del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos de Guatemala – Ipnusac-
También dice que estos centros han influido en la opinión pública hasta llegar a polarizarla y son importantes porque generan conocimiento para poder hacer abordajes profundos.

¿Cuántos hay?
En Guatemala funcionan varios tanques de pensamiento y entre ellos hay para tratar temas sociopolíticos como la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes); la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso); el Instituto de Gerencia Política (Ingep); el Instituto Centroamericano de Estudios Políticos (Incep); el Instituto de Ensañanza para el desarrollo sostenible (Iepades); el Centro de Análisis de las Decisiones Públicas (Cadep) y el Ipnusac.
También los hay con especialización en temas económicos y fiscales, tales como el Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN); el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi) y el Centro de Estudios Económicos y Sociales (CEES). Posiblemente haya más, pero todavía no existe un directorio que lo confirme.
En su página electrónica Asíes se autodefine como un tanque de pensamiento que cuenta con expertos multidisciplinarios que realizan reflexión intelectual, análisis de coyuntura y propone la adopción de políticas sobre asuntos estratégicos de los temas políticos, económicos y sociales del país. Fomenta la creación y fortalecimiento de espacios de diálogo y debate, también capacita a futuros tomadores de decisiones y cuadros políticos.
Los analistas de Asíes han figurado en Guatemala en algunos momentos de coyuntura política nacional como lo fueron los acuerdos y firma de la paz. En su momento, Raquel Zelaya, directora ejecutiva de esa institución, trabajaba en la Secretaría de la Paz.
El surgimiento de los tanques de pensamiento se debió a que especialmente en Latinoamérica no había investigación en las universidades; por lo tanto, había que formular ideas y propuestas de qué hacer con el país y no existían suficientes propuestas de parte de la academia. Lamentablemente, por todos los procesos políticos que se vivían en el país en ese entonces, los partidos políticos no contaban con centros de pensamiento; por lo tanto, hubo necesidad de que surgieran de manera independiente, cuenta María del Carmen Aceña, varias veces presidenta del CIEN y actualmente a cargo del área de seguridad.
Luis Fernando Chávez, encargado de la unidad de formación política del Incep, manifiesta que nosotros generamos análisis político a través de ciertos documentos a nivel centroamericano y a diferencia de otras instituciones, hacemos análisis de coyuntura y política de Centroamérica. También capacitamos y contribuimos en la formación política de jóvenes, mujeres y pueblos indígenas centroamericanos que comparten el pensamiento humanista democrático.
Y damos acompañamiento a varios partidos políticos de Centroamérica. Por ejemplo, en Costa Rica a la Unidad Social Cristiana; en Panamá, al Partido Popular; en El Salvador, al Partido Demócrata Cristiano y en Honduras, al Partido Nacional. Pero en Guatemala no trabajamos con ningún partido por carecer de ideología los que están presentes; sin embargo, trabajamos por la construcción ciudadana, democracia y la comunicación política, así como en la formación y análisis político de los guatemaltecos.
La generación de debate con una perspectiva ideológica es el mayor aporte que un tanque de pensamiento puede hacer, afirma Luis Mack, analista sociopolítico independiente. Estas son unidades que se dedican a definir grandes nortes estratégicos, ya que están anclados a una ideología con una lógica específica e influir políticamente para encaminar a la toma de decisiones, ya que son unidades importantes en una sociedad que permite superar el cortoplacismo. La toma de decisiones basada en evidencia y la evaluación de políticas públicas es una práctica sana que fortalece a un país como Guatemala, dijo Mack.