Para Slowing, no contar con bases de información adecuadas es una gran limitante porque no se puede planificar o programar un servicio si no se sabe a cuántos se tiene que llegar. A su criterio, no tener el censo actualizado es un déficit para el país. Además, considera que una de las razones para no tener datos es porque le da discrecionalidad al que tiene el poder, es decir, le permite incidir en el destino de los recursos de manera arbitraria, puntualizó.

Pira dijo que no contar con un censo actualizado representa una pérdida en diferentes ámbitos. Expuso que los datos que dan entidades de gobierno están proyectados en censos elaborados hace más de 13 años, situación que solo permite el análisis de datos con proyecciones. Resaltó que un censo, más allá de ser un conteo de casas y de personas es la caracterización de los hogares, de las viviendas y de las personas. Citó como ejemplo de utilidad de datos nuevos, la mejor disposición de los recursos que podría tener el Tribunal Supremo Electoral (TSE) para ubicar mesas más cerca de los votantes. Otros casos que mencionaros fueron la asignación presupuestaria para las municipalidades y la cantidad de diputados.

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