Mina Marlin, operada por Montana Exploradora de Guatemala S.A., subsidiaria de Goldcorp Inc., comenzó desde el año pasado la fase de reducción de su extracción de oro. En tres años (de 2014 a 2016) la explotación de ese mineral disminuirá 25.8 por ciento, como parte del cierre de operaciones previsto para 2017.
Durante 2013, la producción de Marlin fue de 202 mil 200 onzas de oro, mientras que en 2014 cerró en un promedio entre 175 y 185 mil onzas, la que será similar o menor en 2015, explicó Mario Marroquín, director ejecutivo de Montana.
Para 2016, la compañía estima que extraerá unas 150 mil onzas, ya que sería el último año de producción para luego continuar con la fase de recuperación total del área explotada.
“Montana invierte unos US$5 millones al año en trabajos de recuperación de los 2.5 kilómetros que comprende el proyecto; son trabajos en conjunto a la producción para no esperar hasta el final del cierre, que más o menos durará un año más después del cierre”, detalló.
El proceso técnico de cierre, comenta Marroquín, inició en octubre de 2012, en total, la empresa invertiría unos US$19 millones, entre el relleno del Tajo Marlin, reforestación y recuperación total.
Sector reprimido
El director ejecutivo de Montana aseguró que la compañía no tiene contemplado continuar operando algún otro proyecto minero en el país, debido a las condiciones “poco óptimas” que tienen en Guatemala para garantizar el retorno de las inversiones.
“Tener una moratoria, los fuertes conflictos sociales sin diálogo gubernamental fructuoso, precios internacionales a la baja y, ahora, un incremento en las regalías, no dan un buen ambiente para seguir invirtiendo. Y me atrevo a decir que en los siguientes 10 o 15 años no se verán proyectos mineros de gran escala”, dijo.
Al respecto, Mario Orellana, presidente de la Gremial de Industrias Extractivas (Gremiext), indicó que no existe una garantía que otras compañías continúen operando, explorando o explotando en Guatemala, porque la situación ha sido inestable y con pocas garantías para la industria.
Según la Gremiext, en el país solo seis empresas se encuentran en producción. Marlin de Montana Exploradora; Planta San Miguel, de Cementos Progreso; El Arenal, El Soyate S.A.; El Escobal, Minera San Rafael; Proyecto Fénix, CGN/Solway, y El Tambor, Exmingua/Radius Gold.
Entre las que están próximas a entrar en producción está la Planta San Juan de Cementos Progreso y Cerro Blanco, Entre Mares, S.A.
Asimismo, las compañías Goldfields; BHP Billiton; Vale y, Hudbay abandonaron la plaza en los últimos años.
Legislación más rígida
Las condiciones en que trabaja las industrias extractivas en Guatemala son demasiado “dóciles”, considera Juan Carlos Carrera, consultor ambiental de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes).
El Ministerio de Energía y Minas debería solicitar la aprobación de una ley minera que sea más rígida, que obligue a tener mayores regalías, impuestos y compromisos ambientales.