Siglo21 Sección: Nacional Página: 6

Plan para tarjetizar los programas sociales sigue

Con el propósito expreso de evitar las acusaciones de clientelismo de las que fueron objeto los dos gobiernos precedentes, el Ministerio de Desarrollo Social (Mides), sigue trabajando sobre la idea de hacer llegar de manera novedosa el subsidio que se otorgue a la población beneficiaria.

Se insiste en que los subsidios monetarios, que antes se llamaron Bolsa Solidaria y Bolsa Segura, serán entregados a través de una tarjeta de débito, con la cual, las personas tendrán la libertad de gastar el dinero que se les otorgue, comprando alimentos necesarios para su familia.

Para ese efecto serán autorizados centros de compra, como tiendas/abarroterías -de barrio- debidamente autorizados por la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), dijo Jenny Alcázar, directora del departamento de Comunicación del Mides.

De este modo, agregó la funcionaria, se apoyaría a la economía informal por medio de las tiendas que se autorizarán para efectuar las compras.

Según Alcázar, la garantía de transparencia en la entrega del subsidio es el involucramiento de una entidad bancaria seria y la no participación directa del Mides en el programa coordinado por el viceministerio de Protección Social.

Alcázar refiere que otro factor de transparencia en el proyecto es que el personal del ministerio no tendrá contacto directo con proveedores, para la compra y manipulación de alimentos.

A lo anterior se agrega la participación de otras entidades como la Superintendencia de Bancos (SIB) y del Registro Nacional de las Personas (RENAP), quienes se encuentran apoyando en la elaboración de las bases de datos con la información sobre las personas que aplican para recibir los subsidios monetarios.

La intención es lograr que a través de la SAT y la SIB, se verifique la tenencia de bienes económicos, muebles e inmuebles, de personas que podrían estar en la base de datos con la que se iniciará el proyecto de tarjetización.

SISTEMA A PRUEBA

El plan piloto para la implementación de este programa social, será realizado en municipios del departamento de Guatemala. Y a partir de su revisión, se extenderá a las demás áreas del país.

A este respecto; Raquel Zelaya, presidenta de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (ASIES), indica que llevar a cabo el plan piloto en el departamento de Guatemala no es “lo más deseable”, aunque el mecanismo de entrega le parece adecuado, “tomando en cuenta que la red bancaria tiene una cobertura impresionante a nivel nacional”.

Zelaya agregó que siempre será mejor bancarizar las transferencias, en reemplazo de los actos protocolarios de entrega de beneficios, en donde se crean condiciones de tipo clientelar.

DEBEN FOCALIZARSE

Por separado, Rubén Darío Narciso, consultor de ASIES, señaló que si bien en Guatemala las estadísticas evidencian el repunte de la pobreza y la pobreza extrema, ello no significa que los programas sociales no funcionen.

Recordó que los países que han alcanzado alivio en temas de pobreza como resultado de programas sociales, han extendido sus servicios de salud preventiva, más que curativa, así como la facilitación de almuerzo, aparte de la refacción, de esta forma las personas tienen mejores oportunidades.

“Los indicadores son un reflejo, pero no significa que los programas sociales no funcionen, sino que en Guatemala se han implementado de mala manera”, dijo Narciso.

Agrega que gracias al establecimiento de programas de esta naturaleza, México y Brasil, lograron avances importantes en la disminución de la pobreza, y a nivel de región, son los principales países que alcanzaron uno de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), impulsados por la Organización de las Naciones Unidas.

Otra percepción de Narciso es que los programas tampoco han sido bien focalizados, y “esto lo confirma que el plan piloto será lanzado alrededor del departamento de Guatemala” lugar donde, según el consultor, no se concentra la mayor cantidad de personas en vulnerabilidad y en extrema pobreza.

Contra el clientelismo

Fernando Velásquez, sociólogo e investigador, coincide en la funcionalidad de los programas sociales, “la idea en sí misma no es mala, pero se presta a la manipulación, a cuestiones clientelares”

Refiere Velásquez que el programa Hambre Cero en El Brasil funcionó, de esa cuenta, más de 26 millones de personas fueron apoyadas para salir del hambre, no obstante, agrega que la duda viene de la gente que está detrás de los programas y quiénes son los beneficiarios finales.

Sobre la estrategia de MIDES para impulsar la economía informal, dejando a las tiendas y abarroterías de barrio como encargadas de la distribución de los alimentos, Velásquez indica que en países como Alemania, estas pretensiones son bien recibidas.

Pobreza / En aumento

De acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (ENCOVI), Guatemala refleja entre 2000 y 2014 un aumento de la pobreza del 2.9%, pasando del 56.4 al 59.3 por ciento, equivalente al casi 9.4 millones de personas que viven con menos de Q10 mil 218 por año.

La extrema pobreza se profundizó al pasar de 15.7 a 23.4 por ciento en el mismo periodo. De esa cuenta, el Instituto Nacional de Estadística (INE) contabilizaría a 3.7 millones de guatemaltecos en extrema pobreza, y en pobreza general a 5.7 millones de personas.

De 15.9 millones de habitantes en Guatemala, el INE estima que cerca del 40.7 por ciento personas están fuera del umbral de la pobreza.

La ENCOVI 2014 muestra un incremento de pobreza en la población indígena a 79.2 por ciento frente a un 75 por ciento medido en 2006. En el caso de la población no indígena pasó del 36.3 por ciento a 46.6 por ciento.

Raquel Zelaya

Presidenta de ASIES

“Llevar a cabo el plan piloto en el departamento de Guatemala no es lo más deseable”.

Jenny Alcázar

Comunicación, Mides

“Se apoyará a la economía informal por medio de las tiendas que se autorizarán para efectuar las compras”.

ASIES

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