Fecha:  7/Jun/2014   Periódico: Prensa Libre   Sección: Mundo Económico    Pagina:23

La inminente salida de la jefa del Ministerio de Finanzas (Minfin), María Castro, no oxigenará al Gobierno, afirmó Erasmo Velásquez, director de la Escuela de Economía, de la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac), al evaluar, junto a Pedro Prado, coordinador del Departamento de Investigaciones y Consultoría Económica, de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes), la situación en esa cartera, en el programa Diálogo Libre, que se transmite  por www.prensalibre.com.

¿Cuál es el análisis sobre la salida de Castro  y qué efectos puede traer?
Velásquez: Esto genera inestabilidad. El tema es delicado porque las finanzas requieren de permanencia. El ministro,  por su experiencia, tiene que asesorar para que ejecuten de mejor forma y se asignen los recursos en el presupuesto, al presidente y a los ministros.
La salida de Castro  no es para oxigenar al Gobierno, quien llegue tiene que gozar de un tiempo para acomodarse en el puesto. Es un impacto negativo que influirá en forma negativa.

Prado: Las finanzas pasan por un momento crítico. Como es predecible, va a afectar las finanzas públicas porque el Ministerio de Finanzas es el pivote del Gobierno y de distribuir bien los recursos depende lograr  o no las políticas públicas.

¿Cómo ven la gestión de Castro en relación con Pavel Centeno?
Velásquez: Hay algo común entre los dos: la falta de experiencia. En el período de Centeno existieron las modificaciones que hicieron al presupuesto, eliminaron programas que luego tuvieron que revertir, luego viene la reforma tributaria que hoy vemos que la mayoría de artículos son inconstitucionales y al final solo quedó vigente la reducción de impuestos a la renta a empresas y el incremento de impuestos al asalariado profesional.

Castro recibe con esos problemas la administración con supuesta experiencia, y se piensa que esa experiencia podría liderar la necesidad de un ajuste, pero se erosiona la administración de las aduanas.

Prado: Con Centeno sucedió algo que no fue bueno para la certeza económica. Recordemos las diferencias con Miguel Gutiérrez, extitular de la Superintendencia de Administración Tributaria, cuando el ministro decía que si no se lograba la meta, se realiza el cambio, e igual no se alcanzan las metas, las señales no fueron positivas.

¿Cómo ven la actuación del Legislativo en el tema fiscal?

Velásquez: Primero, incluir una ampliación de presupuesto en una ley de vegetales es engañar a la población y una “güizachada”. Es muy delicado porque desde mi punto de vista se violó el artículo 240 de la Constitución porque cuando la inversión no se encuentra programada en el presupuesto el Congreso no puede hablar sin opinión favorable del Ejecutivo. Además, el artículo  175 constitucional dice que cualquier ley que es contraria a la Carta Magna es nula. Si el presidente  respetara  la Constitución debería vetar el proyecto y presentar con el Minfin uno en los cánones de la ley. Ese ejemplo es de irrespeto a la Constitución.

Si se diera un reajuste presupuestario ¿dónde debería darse?
Prado: No deben ser simples  circulares a las carteras. Contener el gasto debe hacerse con fortaleza, si no, las consecuencias macroeconómicas serán grandes.

Se debe blindar el gasto social en la medida de lo posible, por ejemplo evitando gastos superfluos de  publicidad, teléfonos,  combustibles, siempre y cuando no sean de la Policía y para los bomberos.

¿Qué riesgo se corre con el endeudamiento?
Velásquez: La deuda es muy delicada. El incremento en la deuda debe verse en relación con la capacidad de ingresos. Por ejemplo,  hoy la deuda está arriba de los Q115 mil millones y  el Estado recauda Q50 mil millones, es decir  ya debemos dos presupuestos.  Asimismo, el endeudamiento tiene efecto en las bases del Estado, que son los contribuyentes, es decir que se están comprometiendo ingresos futuros y como consecuencia a futuro se tendrá menos ingresos para cumplir con obligación del Estado.
Prado: Lastimosamente en países como Guatemala necesitamos de la duda. Si esta se usa para crecimiento económico va a tener una repercusión positiva, pero debe ir acompañada de transparencia y calidad de gasto público. Hay que recordar que ya nos acercamos a valores críticos que señalan los organismos internacionales.

Gabinete Económico

Erasmo Velásquez opina que el Gabinete Económico ha fallado y que “es evidente la descoordinación que hay en el país”, y afirmó que no se ve claro cómo el Gobierno pueda aprovechar “los pocos y escasos recursos que tiene para atender las necesidad que tiene el pueblo”.
Pedro Prado aseguró que los ejemplos en los cuales se basan las críticas sobre descoordinación  “llaman a la reflexión”, por lo cual  “para  el Gobierno, con base en los recursos de que dispone y  en la medida que se tenga conciencia, tendrá una mejor coordinación”.

POR CARLOS ÁLVAREZ /

ASIES

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