Hace unas semanas pudimos escuchar los planteamientos de varios candidatos sobre el tema de educación. En un Foro organizado por la Universidad del Valle de Guatemala, en coordinación ASIES, la Gran Campaña Nacional por la Educación, Guatevisión, Empresarios por la Educación, Fundesa, Fundación Tigo y Funsepa, hubo un sentido compromiso de los partidos políticos con este sector, habiéndose comprometido los aspirantes a la Presidencia a dar prioridad al tema, así como a dar continuidad a procesos en marcha, incluida la reforma de la carrera inicial docente. Luego del evento, varios manifestaron a los organizadores su disposición a analizar más profundamente los planteamientos sobre educación, interesándose en tener algún seguimiento al Foro. Este es el momento propicio para sostener dicha conversación, por lo cual les reitero una invitación a hacerlo. Además, ahora que la contienda electoral se ha reducido a dos de los binomios, surge la posibilidad de alianzas entre partidos, lo cual requerirá que, más allá del probable traslado de votos, exista una auténtica conciliación y complementariedad entre las ideologías, proyectos y propuestas de quienes se sumen de cara a la siguiente elección.

Esta segunda vuelta se dará en el marco de una estrecha vigilancia ciudadana, en donde todos los guatemaltecos estaremos atentos a las trayectorias y agendas de gobierno de FCN Nación y de la UNE. Ojalá en los próximos días sea posible conocer a mayor profundidad no solo las estrategias educativas previstas en sus planes de trabajo, sino más información sobre los equipos de trabajo que acompañarán a los candidatos. La educación es un tema demasiado importante, como para no interesarse en estos asuntos. También es imperativo que los futuros líderes del país se ocupen en este momento de tender puentes entre todos los sectores del país y que construyan alianzas con otros partidos políticos y grupos para consensuar una agenda educativa mínima, que tenga mejores perspectivas de ser materializada. También es importante recordar que el Congreso de la República se pronunciará próximamente sobre el proyecto de presupuesto para el 2016. Las posibilidades de que el mismo no sea aprobado existen, por lo que es probable que el Organismo Ejecutivo se vea obligado para operar con el presupuesto 2015, lo cual representaría para el Ministerio de Educación un desafío enorme, complicando no solo la ejecución de los programas recurrentes, sino prácticamente maniatando a la nueva administración de poder impulsar nuevas cosas.

El próximo ciclo escolar coincidirá con el inicio de la gestión liderada por Jimmy Morales o Sandra Torres. Nuestros niños, niñas y jóvenes no pueden esperar más, pues su destino depende de la seriedad con que los futuros gobernantes respalden a la educación. Ninguna estrategia de crecimiento económico dará frutos si no contamos con el talento requerido para darle vida y sostenibilidad. Usted tiene la posibilidad de elegir. ¿Quién considera que dará al tema el lugar que merece y tendrá el liderazgo para impulsar las reformas educativas necesarias?